ya no tengo ningún miedo a tener que formatearlo

El minimalismo es un estilo de vida que exploración la simplicidad en muchos aspectos, como en la ornamento del hogar, pero yo he llevado este estilo asimismo a mi ordenador donde tener mucho almacenamiento es una auténtica tontería, puesto que lo tengo prácticamente infructifero. Esto me ha permitido respirar tranquilo cuando por lo que sea tengo que restaurar el ordenador por un falta o porque simplemente ha entrado un ransomware.

Esto era poco impensable en el pasado. Hace unos abriles el disco duro era un superficie donde se almacenaban películas, música, fotografías, documentos muy importantes y mucho más. Esto hacía que si el ordenador fallaba y se tenía que formatear por lo que sea se cayera el mundo encima porque fielmente se perdía una gran cantidad de información, expresiones o archivos que costaron mucho de descargar de internet.

La idea de que el disco duro hiciera un "clac-clac" mortal o que un virus encriptara todos mis archivos era una fuente de ansiedad constante. Hacíamos copias de seguridad en CDs, luego en DVDs, y más tarde en discos duros externos que, seamos sinceros, rara vez actualizábamos. Perder el ordenador significaba perderlo todo.

Un disco duro infructifero gracias a la importancia de las nubes

Hoy, mi escritorio está expedito. Y es poco que transmite mucha paz (aunque puede que sea solo a mí que me gusta lo minimalista en todos los aspectos de mi vida). Las carpetas de documentos, imágenes o música están completamente vacías, y si mañana un ransomware secuestra mi sistema y me pide un rescate con Bitcoin, lo único que debo hacer es averiguar un USB para formatear. Todo gracias a que he decidido creer en la montón para todo.

Obviamente, esto no ha sido un cambio de la oscuridad a la mañana, pero sin duda al rememorar mi ordenador de hace diez abriles y al de ahora hay una diferencia abismal. El único aspecto donde no soy minimalista es en el gran caos que tengo en mis navegadores con decenas de pestañas abiertas. Aunque esto es poco que tengo irresoluto de solucionar.

La montón ha sido la gran decisión. Adiós a los archivos .doc y .xls guardados en tópico. Ahora, todo mi flujo de trabajo se hace a través de Google Drive y iCloud Drive. Cada documento, hoja de cálculo o presentación se va directamente con destino a la montón para tenerlo habitable en cualquier momento. Lo mismo ocurre con las fotografías que residen íntegramente en Google Fotos o en el disco de fotografías de Apple.

Y es que con los avances tecnológicos ya cada vez es más difícil encontrar a cierto que tenga todo almacenado en sus unidades de almacenamiento locales. Y esto evidencia claramente con destino a donde nos dirigimos todos.

La música asimismo ha pasado de ser un archivo que descargábamos en el pasado con Ares o Torrent a tenerlo a un simple clic gracias a los servicios de Apple Music o Spotify. Ya de esta forma no ocupa espacio en mi propia mecanismo de almacenamiento, dejando el hecho de acumular MP3 como poco del pasado, quedando reservada a los profesionales que se dedican a crear pódcast o algún contenido primoroso.

Los juegos puede que fuera el gran problema, pero nuevamente las plataformas que hay ahora mismo disponibles lo ha facilitado mucho. Al usar Steam, es sobrado sencillo descargar un entretenimiento, disfrutar de el y cuando se acabe desinstalarlo al momento. No hace ninguna función tenerlo instalado si no lo voy a competir nunca más o en meses. Por suerte volverlo a descargar es sobrado sencillo.

Pero aunque Steam es una gran opción con Steam Cloud para seguir las partidas, ahora mismo siquiera es necesario. Hay otros servicios, que aunque no uso frecuentemente, como GeForce NOW o Xbox Cloud Gaming donde no es necesario instalar absolutamente falta, ya que se juega en los servidores online.

La sinceridad del disco duro infructifero. Con todo esto, ahora mismo tengo total tranquilidad, ya que si un virus invade mi ordenador no hay ningún tipo de archivo que pueda cifrarse en el disco duro, ya que todo lo importante no está almacenado de forma tópico. Que lógicamente en los servidores de Google, Microsoft o Valve siquiera se está 100% seguro, pero hay un importante respaldo detrás.

Esto asimismo se suma a que formatear el ordenador se ha convertido en un trámite. Tanto el PC con Windows como el MacBook los puedo formatear en cualquier momento, que lo único que deberé hacer es instalar las cuatro aplicaciones instaladas, y perder ese tiempo de aplazamiento mientras se está reiniciando. Es por ello que siempre he abogado por un almacenamiento corto en cualquier dispositivo que he comprado. Y siempre me ha sobrado.

Obviamente, esta táctica no es perfecta. Todo este sistema se sostiene sobre una conexión a internet fiable y rápida. Sin ella el ordenador se convierte en un pisapapeles. Encima, se suma el coste de las suscripciones que hay que sufragar por alguno de estos servicios, como un almacenamiento extendido en Google Drive o la montón de Apple.

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