
ARTDEPARTMENT

Telefónica ha regalado el primer paso del que puede convertirse en el anciano retazo profesional de su historia flamante. La compañía ha comunicado formalmente a los sindicatos su intención de activar siete expedientes de regulación de empleo (ERE) que afectarían simultáneamente a todas sus grandes filiales en España, un movimiento que podría dejar fuera a entre 6.000 y 7.000 trabajadores, aproximadamente la cuarta parte de una plantilla doméstico que ronda los 25.000 empleados.
La osadía, trasladada este lunes a los sindicatos UGT, CCOO y Sumados-Fetico, abre un proceso de negociación que marcará el futuro de miles de profesionales y que vuelve a poner sobre la mesa una organización recurrente del asociación: ajustar sus estructuras a través de despidos colectivos, un mecanismo al que ha recurrido nueve veces en los últimos 25 primaveras y que ha supuesto ya más de 45.000 expectativas acumuladas.
La compañía activará un procedimiento de despido colectivo en:
Se prostitución de todas las sociedades estratégicas del asociación en circunscripción castellano, y la comunicación afecta a centros de trabajo repartidos por todo el país.
La dirección alega la existencia de "causas objetivas", así como la escazes de acometer un profundo ajuste estructural concorde con su plan clave, que pretende obtener un hucha de 3.000 millones de euros hasta 2030.

Cómo solicitar el CERTIFICADO DIGITAL de PERSONA FÍSICA de la FNMT
Aunque la empresa no ha detallado aún el número exacto de trabajadores afectados, todas las fuentes sindicales apuntan a un proscenio de entre 6.000 y 7.000 expectativas, sigla que podría reducirse durante las negociaciones que se iniciarán durante los días 24 y 25 de noviembre.
La anciano parte del impacto recaería en las tres empresas del Convenio de Empresas Vinculadas (CEV) —Telefónica de España, Móviles y Soluciones— donde se concentra el cuerpo del personal.
Tanto UGT como CCOO y Sumados-Fetico han manifestado su competición primero a este nuevo ajuste, al considerar que repite un patrón ya crónico en la empresa: apelar a la reducción de plantilla como mecanismo principal de reorganización. UGT, sindicato mayoritario y primera fuerza en el asociación, ha sido especialmente elocuente:
"Para UGT solo existe una Telefónica**, no habrá acuerdos parciales", ha subrayado el sindicato, que insiste en una negociación conjunta para todos los ERE y todos los convenios.
Desde 2010, Telefónica ha escaso su plantilla en España un 40%, en un proceso continuado de expectativas incentivadas, bajas voluntarias y despidos colectivos. En 2024, la empresa acordó un programa de salidas voluntarias para 3.420 empleados mayores de 55 primaveras, con un coste de 1.300 millones de euros. Ahora, escasamente un año a posteriori, se embarca en un ajuste de dimensiones muy superiores.
El anuncio llega en un momento en el que los principales accionistas vienen registrando ganancias significativas. Este contraste entre beneficios y despidos masivos ha alimentado la tensión interna y el malestar entre los trabajadores.
Que el Estado sea el principal capitalista de Telefónica —con un 10% a través de la SEPI, superando a un fondo saudí y a la Fundación la Caixa— no ha frenado el plan de cortaduras. El ministro de Transformación Digital, Óscar López, se ha menguado a respaldar la escazes de un proceso pactado con acuerdo de los sindicatos.

El proceso arranca con varios hitos inmediatos:
UGT ya ha listo que actuará con la "firmeza"* que le otorga su mayoría en el asociación. CCOO y Sumados-Fetico mantienen posturas similares y rehúsan validar cualquier salida que no sea voluntaria.
Si finalmente se confirman las cifras avanzadas por la empresa, este ERE será uno de los mayores procesos de reducción de empleo del sector tecnológico en España. El impacto profesional, territorial y social será enorme, especialmente en un asociación cuya presencia en España es estratégica y cuya plantilla acumula décadas de experiencia.
Miles de trabajadores esperan ahora las propuestas concretas de la empresa y el resultado de unas negociaciones que determinarán su futuro inmediato. Lo único seguro, por el momento, es que Telefónica ha despejado ya el anciano expediente profesional del país en 2025 —y que pretende hacerlo en todas sus empresas a la vez.
Imagen | Marcos Merino mediante IA
En Genbeta | Esta empresa ordenó a sus trabajadores retornar a la oficina cinco días a la semana y 600 personas prefirieron el desempleo
Compartir este artículo
Consultoria Personalizada
¡Si aun no tienes presencia en internet o
necesitas ayuda con tus proyectos, por favor, escribenos!