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Desde el año 2022 Google ha llevado a punta varios despidos masivos. A veces con muy poco tacto como cuando decidió quitar a los empleados su acercamiento a los sistemas sin avisar previamente de que estaban en la calle. Por otra parte, ha ido recortando derechos y reglas de flexibilidad sindical. Por ejemplo, hace poco exigía que todo el mundo vuelva a la oficina, lo que exige a personas mudarse cerca de Mountain View.
No hay que olvidar que muchos expertos han notorio que las empresas imponen la revés a las oficinas u otras reglas estrictas para alcanzar que la familia se vaya y evitar despidos (que pueden venir de la mano de costosas retribuciones a los empleados). La última novedad de Google puede ser otra táctica más de lo que se conoce como "despidos silenciosos". Se ha filtrado un documento interno que los directivos han enviado a los trabajadores y que les ofrece "retiros voluntarios", es sostener, irse de la empresa por su propio pie.

La empresa ha ofrecido incentivos de salida de empleados de Google a trabajadores de muchas de sus divisiones: a los especializados en su buscador, información, ingeniería, marketing, investigación y comunicaciones, entre otros en el interior de lo que han falsificado como VEP cuyas siglas pueden ser: Voluntary Exit Program.
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Lo que claridad la atención es la información que se ha filtrado de la carta interna. Nick Fox, directivo de la empresa liderando el área de búsquedas y publicidad, envió ayer una carta a su equipo que decía que: "Quiero ser muy claro: si estás entusiasmado con tu trabajo, harto de energía por la oportunidad que se te presenta y rindes perfectamente, espero de verdad (¡de verdad!) que no aceptes esto. Tenemos planes ambiciosos y mucho que hacer".
Para añadir que ese documento ofrece "un camino de salida con apoyo para aquellos que no se sienten alineados con nuestra organización, no se sienten energizados por su trabajo, o están teniendo dificultades para cumplir con las expectativas de su rol en el interior de la empresa".

El «software de salida voluntaria» se aplica a los empleados de las oficinas de Estados Unidos, mientras algunos equipos incluso están obligando a retornar a la oficina a los trabajadores remotos que viven a menos de 80 kilómetros de una oficina, según confirmó la empresa a CNBC y como ya vimos en Genbeta.
La portavoz de Google Courtenay Mencini ha explicado que "a principios de este año, algunos de nuestros equipos introdujeron un software de salida voluntaria con indemnización para los Googlers" y ahora más equipos se unen a esta iniciativa, como el de búsquedas.
Ya habíamos recogido información interna de la empresa sobre el descontento existente en parte de la plantilla. Mientras se sucedían los despidos, el CEO de la empresa se subió el sueldo, pasando a ser uno de los mejor pagados, y la firma ha ido anunciando beneficios. Por otra parte, hace unos meses, uno de los fundadores de la empresa pedía a los trabajadores echar 60 horas de trabajo a la semana para crear una gran IA.
Todo esto ha provocado la ira de los trabajadores de Google. Incluso se llegó a filtrar que las plataformas internas de Google se llenaron de conversaciones y memes en los que se criticaba al guía delegado y los empleados han desvelado que hay una enorme brecha entre la dirección y los empleados.

Un ejemplo, en los primeros tiempos de Google, los cofundadores Larry Page y Sergey Brin (que ahora pide trabajar 60 horas) se reunían en un evento, falsificado desde el principio como TGIF (estas siglas suelen corresponder al Gracias, Altísimo, es viernes, por cómo se dice en inglés) donde hablaban directamente con los empleados presentes en la sala. Según The Verge, solía ser un diálogo cómodo y natural para aumentar la décimo, la comunicación y la confianza, pero que con las tensiones, las preguntas para el diálogo pasaron a enviarse previamente.
Hay una tendencia de la que se deje en los últimos abriles y que se ha denominado como despido silencioso. Esto quiere sostener que una empresa no claridad a un empleado y le dice "estás despedido tienes que irte", sino que le va ofreciendo puestos en el interior de la compañía o tareas aburridas en las que el empleado ya no se siente valioso, para ver si acaba dejando el puesto. O incluso no tratar especialmente perfectamente a los trabajadores.
Imagen | Foto de Greg Bulla en Unsplash
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