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Un puerto USB para muchas personas es simplemente un división para conectar un periférico sin conocer que hay diferencias entre los USB, ya que no todos son iguales. Sin ir más allí en la televisión de nuestras casas o en el ordenador vamos a tener que conocer las diferencias que hay entre estos puertos para sacarles el mayor provecho posible.
En este artículo te contamos como identificar los diferentes puertos USB que podemos encontrar en cualquier tipo de dispositivo que tenemos a nuestro luces. Y la formas de reconocerlos radica en el color de sus conexiones o en el número de pines con el que cuentan.
Si vas a tu ordenador seguramente habrás pasado que no todos los conectores USB tienen el mismo color. Lo mismo ocurrirá en tu televisión o en tu videoconsola. Precisamente el color es uno de los sistemas que tenemos para poder identificar cada uno de los tipos de USB con el objetivo de sacarles el mayor provecho posible.
El color blanco es la forma más clásica o antigua. Este es el USB habitual 'de toda la vida' al contar con una velocidad de transferencia de 1,5 Mbits/s. Esto hace que sea recomendable conectar los periféricos a este puerto como por ejemplo un teclado o un ratón. Todos los dispositivos que no requieren de una transferencia de datos rápida. Esto es lo que podemos obtener a conocer como USB 1.0.
El color desafortunado es uno de los más presentes en nuestro día a día y que corresponde a los USB 2.0 que cuentan con una velocidad decano de 480 Mbit/s (60 MB/s). Pero al estar allí de los estándares más recientes, todavía ha quedado relegado a la conexión de periféricos.
El color cerúleo corresponde al USB 3.0 o 3.1 de primera coexistentes y puede que tengas varios en tu ordenador o tu televisor al ser muy utilizados (al contar ya con varios abriles a sus espaldas). Ofrecen una velocidad de transferencia de hasta 10 Gbits/s (1,25 GB/s) y ya si se convierte en una conexión ideal para tener conectada una pelotón de almacenamiento externa.
El color rojo es uno de los estándares más recientes presentado en 2019 posiblemente no lo hayas pasado nunca. En este caso el USB 3.2 ofrece velocidades de 20 Gbit/s (2,5 GB/s).
El color amarillo o naranja no tiene un claro protagonismo en la transferencia de datos, y se "especializa" en la carga rápida. Precisamente van a proporcionar un amperaje suspensión sin alterar el voltaje. Estos puertos van a suministrar energía siempre a los dispositivos que estén conectados, aunque el equipo (como el ordenador) no esté arrancado.
Los colores no es la única forma de identificar un puerto USB. Los pines o contactos que tienen en su interior todavía son formas de asimilar ayer que habitual estamos delante para sacarle el mayor provecho posible. Aunque solo vamos a poder diferenciar si se alcahuetería de un USB 3.0 o 2.0.
En su parte física podemos ver como el USB 3.0 a veces se ceremonial con las saber 'SS' en alguna parte de su chasis para indicar SuperSpeed. Por otra parte, estos pueden tener en su parte más trasera una chapa interna que no vemos en los USB 2.0.
De esta forma ya vas a poder determinar qué conexión USB usar para cada uno de los usos que quieras darle. Será la forma ideal para utilizar al mayor el hardware que tienes a tu luces.
Vía | Xataka Home
Imágenes | Rudy and Peter Skitterians
En Genbeta | Un pendrive cogiendo polvo es un USB desaprovechado: 10 ideas para sacarle el mayor partido en tu PC
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