La gente desagradecida termina agotando a sus compañeros de trabajo. Hay seis frases que suelen usar y todas tienen un por qué

Ya hemos trillado que hay perfiles de personas que, internamente de una empresa, pueden resultar agotadores para sus compañeros de trabajo y concluir minando la honrado de la plantilla. Un perfil muy embarazado es el del trabajador ruidoso, que es quien pasa más tiempo hablando de sus logros que trabajando y suelen estar exigiendo una constante atención. Además tener un narcisista en una empresa puede concluir con las dinámicas sanas.

Hoy vamos a ver un tipo de persona que además puede padecer a una desmoralización de la plantilla. La gentío desagradecida. Hay que tener en cuenta que, aunque no podemos estar siempre contentos y felices, porque en la vida encontramos a menudo muchos reveses y momentos de gran tristeza, la queja constante puede afectar negativamente a nuestra salud mental e incluso en la sanidad física. Y tener a cualquiera cerca que nunca agradece, además.

Hoy vamos a identificar a las personas poco agradecidas para poder comprender mejor que el trato que recibimos de ellas no es cero personal contra quien las padece, sino que es su forma de ser.

Junto a además mencionar que puede que sea tu jerarca este perfil de personas que nunca agradece y eso puede ser más atosigante aún. Tirando de hemeroteca o buscando en redes sociales profesionales como LinkedIn, podemos encontrar gerentes que dicen abiertamente que no hay que agradecer a los trabajadores porque ya reciben su salario por padecer a angla tus tareas. Otros dicen estar muy ocupados con su trabajo.

Frases propias de gentío que nunca agradece

Como recoge Trendencias en un reportaje, este perfil de personas suelen repetir a menudo seis frases o comportamientos que demuestran que expresar obligación cerca de lo positivo que les rodea no va con ellas.

1-Se centran en lo placa y en lo que desidia, por otra parte de apañarse su propio beneficio. Pueden usar frases como "me debes una". Las personas desagradecidas tienden a concentrarse en lo que les desidia en la vida, en vez de en lo que tienen. Conmemoración una vez que un conocido que cumple conveniente con estos comportamientos que los expertos describen, me llamó el día de su cumpleaños sorpresa para reprocharme que no había ido. Era en una ciudad lejana y yo estaba a punto de mudarme de país, por lo que estaba preparando todo para irme y aprovechando a despedirme de mi comunidad.

Habían acudido muchísimas personas pero él pasó más de una hora al teléfono sin estar con ellos mientras me reprochaba mi abandono. Le dije: aprovecha para disfrutar de quienes sí están. Lo conozco y tiene la tendencia de fijarse en lo que desidia así que decidí no tomarlo como poco personal, aunque me resultó, obviamente, embarazado.

Los expertos demuestran que verdaderamente esta insatisfacción genera "una saco tóxica para las relaciones". Como recoge Trendencias, cuando empatizamos, agradecemos y expresamos obligación a  otra persona, se produce un aumento de la confianza y de la intimidad.  Sin bloqueo, si cuando hacemos poco por otra persona lo hacemos pensando en que nos debe una, en que el objetivo es percibir poco de reverso, ahí no hay altruismo ni obligación, solo interés.

2-Reprochar los momentos en que sí te apoyaron o creen que lo hicieron. Usan frases como "yo estaba allí cuando no tenías a nadie" o “Nunca me das las gracias cuando hago cosas por ti".

Según los estudios, las personas que no agradecen, siquiera suelen ser leales y, por otra parte, exigen a los demás poco que ni siquiera dan. En caso de ayudar, pueden ir echando en cara este cara, porque solo están esperando percibir gran atención de reverso. Si, por ejemplo, estuvieron contigo en un momento de tu vida, aunque ni siquiera fuera un gran apoyo, tienden a echarlo en cara.

El objetivo, de acuerdo con los expertos es que, en vez de corresponder el tiempo conjunto, se centran más en manipular a la otra persona y buscan un agradecimiento excesivo, con ello.

Las personas ingratas no encarnan la verdadera cumplimiento en sus relaciones; en cambio, instan a otras personas a "trabajar por" su cumplimiento condicional con frases como las mencionadas. Su amabilidad, empatía equivocada y compasión solo alimentan su visión transaccional de las relaciones. Si hacen poco por cualquiera, lo guardan para demandar en el futuro más atención.

3-Piden excesivo registro por lo que hacen y utilizan frases como "no me agradece lo suficiente todo lo que he hecho". Un estudio de 2023 sobre la gratitud sugiere que los niños que crecen con cuidadores y padres que priorizan la obligación en sus vidas suelen tener mejores relaciones sociales y una sanidad emocional más equilibrada que sus compañeros desagradecidos.

Al mismo tiempo, cuando un padre o hermana retraso obligación en respuesta a cada influencia de crianza, desde darle un circunscripción en el que comportarse o comprar alimentos, es probable que sus hijos adultos trasladen esta mentalidad a sus relaciones con otras personas.

El bienestar subjetivo evalúa la autopercepción de la calidad de vida de un individuo y refleja su funcionamiento social y sus capacidades de acondicionamiento. Se ha descubierto que un nivel más alto de esta percepción de uno mismo además se traduce a una mejor sanidad física, relaciones sociales más sólidas y un rendimiento culto o sindical superior, mientras que cuando es bajo habrá más conductas problemáticas.

4- Echar balones fuera y culpar a otros de su insatisfacción. Usan frases como: "Me siento infeliz y no sé por qué".

Aunque a primera panorámica parezca que no cuadra, los estudios apuntan a que las personas ingratas suelen ser muy negativas. Imagínate que estás hablando de un nuevo plan y que inmediatamente se centran en todos los posibles obstáculos que van a aparecer sin registrar las oportunidades que puede traer. Si cualquiera es constantemente placa, se queja sin ofrecer soluciones y ve problemas en todo, eso es una gran señal de alerta. En el trabajo puede ser incluso un escollo.

Una investigación presentada por Harvard Health Publishing reveló que las personas que expresan gratitud con más frecuencia en sus vidas son generalmente más felices que quien no lo hace. Las personas desagradecidas a menudo se sienten crónicamente insatisfechas, desde su propio progreso personal hasta sus relaciones, porque les cuesta expresar agradecimiento a otras personas en sus vidas. Esto incluye a sus compañeros de trabajo.

Por otra parte de la manipulación de la que dependen constantemente y la naturaleza transaccional de sus relaciones, sus interacciones a menudo están guiadas por la ansiedad y las expectativas que se imponen equivocadamente.

Los pertenencias de corresponder

Es importante añadir cuáles son los efectos positivos de agradecer. Una investigación de la revista Personality and Social Psychology examinó el sorpresa de una talante agradecida sobre el bienestar psicológico y físico.

Los grupos que se analizaron que tenían una talante agradecida exhibieron un anciano bienestar en varias facetas. Incluso se hizo un estudio similar en España que, entre otras conclusiones, afirmaba que las intervenciones de obligación pueden tener un sorpresa sobre el bienestar.

Jonathan Pham que es experimentado en autoayuda, recuerda que no decir “gracias” es una señal de ingratitud que puede herir gravemente a los demás. "A menudo nos olvidamos de expresar obligación por diversas razones, desde la incomodidad social hasta el narcisismo, la negatividad o simplemente estar demasiado ocupados".

Añade que no importa cuál sea la causa, las consecuencias son siempre las mismas como que las personas se sienten heridas, la reputación se ve dañada, las relaciones se tensan.

Imagen | Foto de Courtney Hedger en Unsplash

Vía | Trendencias

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