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La compraventa de segunda mano ha incompatible en Wallapop un contorno fértil: desde muebles y ropa hasta tecnología, pasando por diversas clases de coleccionismo, millones de usuarios en España utilizan esta aplicación a diario para economizar/ingresar poco de billete. Es la plataforma preferida por muchos gracias a un funcionamiento aparentemente sencillo, y a un enfoque muy específico... pero no todo es oro lo que reluce.
Precisamente por su popularidad y por la confianza que genera entre particulares, Wallapop igualmente se ha convertido en un caldo de cultivo para estafadores, que recurren a estrategias cada vez más sofisticadas y saben correctamente cómo manipular a sus víctimas, aprovechándose de su buena fe y explotando puntos débiles del sistema.
¡QUE NO TE ENGAÑEN! Los principales TIMOS en COMPRAS ONLINE y CÓMO EVITARLOS
Si tienes pensado entregar o comprar poco por Wallapop, este artículo te interesa, porque vamos a desglosar las estafas más frecuentes de la plataforma (y analizar cómo verlas venir).
Los estafadores en Wallapop no siguen un único patrón. Algunos se hacen acaecer por compradores, otros por vendedores, y muchos buscan aguantar la conversación y la transacción fuera de la plataforma. ¿El objetivo? Eludir el sistema de protección al comprador/mercader que ofrece Wallapop y tener vía soberano para estafar sin consecuencias inmediatas.
Estos timadores suelen invertir técnicas como:
Wallapop, como muchas otras plataformas de compraventa entre particulares, no está exenta de riesgos. Y, como hemos dicho antaño, aunque el sistema de pagos y envíos de la aplicación ofrece garantías, muchos usuarios terminan accediendo a propuestas de realizar tratos fuera del mismo, lo que abre la puerta a fraudes de todo tipo. A continuación, vamos a repasar algunos de esos tipos.
Este tipo de fraude es uno de los más frecuentes. El estafador publica un anuncio con fotos atractivas y un precio muy competitivo, aunque no exageradamente bajo (para no despertar sospechas). Tras despertar el interés del comprador, lo convence para hacer la operación fuera de Wallapop, por ejemplo, a través de Bizum o transferencia bancaria directa.
Una vez realizado el cuota, pueden suceder varias cosas: el producto nunca se envía, o correctamente se envía un artículo diferente, dañado o de beocio valencia. Al intentar pedir, el mercader desaparece: deja de contestar, poso su cuenta o incluso cambia de nombre de sucesor.
Caso verdadero: un sucesor con más de 900 valoraciones positivas vendió una consola retro, pero envió otra totalmente diferente y en mal estado. Al cobrar el paquete, el comprador descubrió el patraña y ya no obtuvo respuesta del mercader.
En esta modalidad, el estafador actúa como comprador. Tras conciliar el precio del producto, afirma sobrevenir realizado el cuota mediante Bizum, PayPal o transferencia bancaria, y envía una supuesta captura de pantalla como 'comprobante'. Sin confiscación, esa imagen ha sido manipulada digitalmente o incluso completamente generada con apps que imitan interfaces bancarias reales.
Con esta táctica sondeo que el mercader, confiado, envíe el artículo antaño de comprobar que el billete ha llegado efectivamente a su cuenta. Una vez enviado el paquete, el estafador desaparece.
Esta reforma del timo previo utiliza una función del sistema Bizum: el remisión programado o cancelable. El estafador 'envía' el billete, pero el cuota queda irresoluto o directamente se anula ajustado a posteriori. Al mercader le llega una notificación o mensaje que parece oficial, lo que genera confusión y puede llevarle a creer que el ingreso está confirmado.
Este tipo de fraude es especialmente peligroso porque muchos usuarios no están familiarizados con los detalles del funcionamiento de Bizum.
Algunos estafadores solicitan una foto del DNI o NIE alegando motivos como "demostración de identidad", "respaldo para el comprador" o "evitar fraudes". En efectividad, buscan usar tus datos personales para brindar cuentas falsas, hacer compras online o suplantarte en otros fraudes, tanto en el interior como fuera de la plataforma.
Recuerda: no estás obligado (no debes, de hecho) a compartir documentos oficiales con desconocidos. Wallapop ya ofrece herramientas para efectuar usuarios sin acogerse a este tipo de prácticas.
En este caso, el estafador asegura sobrevenir realizado el remisión del producto, incluso puede proveer un número de seguimiento embustero. A veces, el número corresponde a otro paquete verdadero no relacionado, o directamente no existe. Asimismo se han reportado casos de "compradores" que dicen sobrevenir devuelto un producto y generan etiquetas falsas de devolución, cuando en efectividad nunca han enviado mínimo de envés.
Algunos estafadores logran hackear perfiles legítimos con buenas valoraciones para representar fiabilidad. Otros crean cuentas falsas con valoraciones simuladas mediante compras ficticias entre perfiles creados por ellos mismos. Así consiguen engañar a las víctimas con una falsa sensación de seguridad.
Este tipo de perfil puede desaparecer horas a posteriori de cerrar una saldo, dejando sin indicio al estafador. En estos casos, es muy difícil recuperar el billete si se ha pagado por fuera de Wallapop.
Una estafa cada vez más sofisticada: el estafador envía un enlace forastero (aparentemente de Wallapop, Correos, SEUR, etc.) para completar el cuota o confirmar un remisión. Al hacer clic, la víctima accede a una web falsa donde introduce sus datos bancarios o credenciales. En efectividad, está entregando esa información directamente al estafador.
Detectar una estafa a tiempo puede marcar la diferencia entre una buena transacción y una pérdida de billete —y en algunos casos, igualmente de datos personales—. Aunque los timadores cada vez emplean métodos más sofisticados, muchos de los fraudes comparten ciertos patrones o señales que, si sabemos examinar a tiempo, nos ayudarán a evitar caer en la trampa.

Una de las señales más claras. Si un mercader o comprador te pide continuar la conversación por WhatsApp, Telegram, correo electrónico o cualquier otro canal, desconfía. Lo más probable es que quiera escapar del control de la plataforma y su sistema de protección.
Si el precio está muy por debajo del valencia de mercado, hay motivos para sospechar. Algunos estafadores colocan precios irresistibles para provocar compras impulsivas sin efectuar detalles.
Los estafadores saben que, si te tomas tu tiempo, es más probable que descubras su mentira. Por eso, intentan apresurarte con frases como “hay más multitud interesada” o “si lo compras ahora te hago disminución”.
No es corriente que un comprador o mercader te pida el DNI, tu dirección completa sin sobrevenir cerrado trato, o información bancaria personal.
Cuidado con los supuestos "comprobantes" de Bizum, transferencias o PayPal. Los pantallazos pueden ser falsificados fácilmente.
Los perfiles recién creados, sin valoraciones o con información escasa, merecen cautela. Asimismo aquellos que, aunque tengan muchas estrellas, no tienen comentarios recientes o tienen reseñas sospechosamente genéricas.
Inspirado en el método LAP de la Policía Franquista para detectar estafas telefónicas, puedes aplicarlo fácilmente en Wallapop:
Aquí algunos consejos esenciales para mantenerte a excepto:
Si ya has caído en una estafa, no te culpes: le ha pasado incluso a usuarios experimentados. Pero actúa rápido:
Imagen | Marcos Merino mediante IA
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