
ARTDEPARTMENT

La Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (UATAE) ha presentado una propuesta al Gobierno que, de encontrar respaldo, podría marcar un ayer y un luego en la estructura contributiva del Régimen Distinto de Trabajadores Autónomos (RETA).
La estructura plantea un sistema más progresivo (tanto que el coetáneo como que el que ha puesto sobre la mesa el Gobierno), que incremente las cotizaciones de los autónomos con mayores ingresos —los que superan los 6.000 euros netos mensuales— y utilice esa colecta para dominar las cuotas de quienes menos ganan.
UATAE argumenta que este clase de altos ingresos representa aproximadamente el 13% de los afiliados al RETA, pero su ayuda proporcional es mucho pequeño que la de los autónomos con rendimientos bajos. El objetivo patente es claro: "quien más deseo, debe aportar más", con el fin de corregir la desigualdad estructural del sistema coetáneo.
Cómo solicitar el CERTIFICADO DIGITAL de PERSONA FÍSICA de la FNMT
Hoy en día, un autónomo que declara 6.000 euros mensuales puede cotizar solo 605 euros a la Seguridad Social, prácticamente lo mismo que un asalariado con un sueldo bruto de 1.500 euros. En cambio, un trabajador por cuenta ajena que deseo además 6.000 euros paga casi 1.900 euros mensuales en cotizaciones (entre empresa y empleado).
Esta disparidad se explica porque los autónomos aún tienen capacidad de nominar su colchoneta de cotización, adentro de unos tramos, lo que les permite cotizar por debajo de sus ingresos reales. De hecho, la gran mayoría —en torno al 85%— sigue optando por la colchoneta mínima, pese a la reforma de 2022 que introdujo la cotización por ingresos reales de forma progresiva hasta 2032.
El resultado, según UATAE, es una brecha significativa: un autónomo con 500 euros de beneficio mensual dedica el 41% de su renta a la cuota, mientras que otro con más de 6.000 euros escasamente soporta un 5% de esfuerzo positivo tras las deducciones fiscales.
UATAE denuncia que esta situación perpetúa un sistema recesivo, en el que "el que menos deseo aporta proporcionalmente ocho veces más que el que más cuenta".

Si los autónomos con ingresos altos cotizaran en proporción a sus ganancias reales, la Seguridad Social podría incrementar su colecta en unos 3.900 millones de euros al año, según los cálculos de UATAE. Esos fondos deberían destinarse íntegramente a dominar las cuotas de los tramos inferiores, de acuerdo con la propuesta.
El planteamiento, adicionalmente, acelera la transición alrededor de un maniquí equiparable al Régimen Genérico, donde las cotizaciones están más directamente vinculadas al salario.
El Gobierno mantiene el horizonte de 2032 para culminar esa reforma, pero la estructura reclama pasos más decididos y un enfoque que combine sostenibilidad con imparcialidad social.
Sin retención, más allá de los cambios fiscales y contributivos, la propuesta de UATAE incluye además una escuadra de medidas orientadas a reforzar la protección social del colectivo autónomo.
Uno de los puntos más críticos es el cese de actividad, una prestación que la estructura califica de "inaccesible". Los datos respaldan su afirmación: entre enero y agosto, el 54% de las solicitudes fueron denegadas y solo el 0,22% de los autónomos la percibía en agosto. En contraste, el 9,5% de los asalariados recibía alguna ayuda por desempleo, con una cobertura superior al 80%.
Por ello, UATAE pide universalizar la cotización por cese de actividad, incluso durante la tarifa plana o cuota pequeña, y extender el subsidio para mayores de 52 abriles a los trabajadores por cuenta propia, actualmente excluidos de ese derecho.
Asimismo propone incorporar la subsidio parcial en el trabajo autónomo, permitiendo compatibilizar el 50% de la pensión durante dos abriles ayer de la etapa ordinaria, siempre que se produzca un exención profesional que garantice la continuidad de la actividad.

El Ejecutante, por su parte, dice coincidir en la escazes de avanzar alrededor de un sistema más equitativo, aunque de forma paulatino: primero empezará cobrando más a los que más ganan, pero los autónomos con menos ingresos tendrán que conformarse con ver cómo sólo se les congela la cuantía de su cotización.
El secretario de Estado de la Seguridad Social y Pensiones, Borja Suárez, ha confirmado que el Gobierno estudia congelar las cuotas de los autónomos con ingresos entre 670 y 1.166 euros mensuales y subir tenuemente las del resto, entre 2,91 y 14,75 euros al mes a partir de 2026.
La heterogeneidad del colectivo de autónomos complica el consenso. Según la Seguridad Social, 3,7 millones de personas estuvieron de suscripción como autónomos en algún momento de 2023. De ellas, casi 1,4 millones declararon rendimientos netos por debajo del salario pequeño, mientras que casi medio millón ingresó más de 4.000 euros netos al mes.
Esa heterogeneidad explica la disparidad de opiniones frente a cualquier modificación del sistema: los autónomos con ingresos modestos reclaman alivio, mientras que los de tramos altos temen una penalización desproporcionada que, según algunos expertos, podría fomentar la capital sumergida o la deslocalización fiscal.
Imagen | Marcos Merino mediante IA
En Genbeta | El precio del arriendo en España no es sólo un problema para radicar... además una herida para crear negocios y un motivo de fracaso
Compartir este artículo
Consultoria Personalizada
¡Si aun no tienes presencia en internet o
necesitas ayuda con tus proyectos, por favor, escribenos!