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El Australian Open, primer Grand Slam de la temporada 2025, ha sorprendido al mundo del deporte (y, sobre todo, a los espectadores) con una iniciativa innovadora: retransmitir sus partidos en YouTube... pero no usando imagen vivo, sino con imagen digital que hace uso de una estética similar al clásico videojuego Wii Sports.
Este nuevo formato, basado en la tecnología de captura de movimiento, inteligencia fabricado y gráficos 3D, ha generado un afluencia de comentarios en redes sociales... pero frente a todo plantea un interesante debate sobre los derechos de transmisión y el futuro del deporte en plataformas digitales.
Desde el pasado 6 de enero, los aficionados al tenis pueden seguir algunos de los partidos más importantes del torneo a través del canal oficial de YouTube del Australian Open. Los encuentros, protagonizados por figuras como Novak Djokovic, Carlos Alcaraz y Jannik Sinner (se hace raro no incluir ya a Nadal en estos listados), han sido recreados digitalmente en tiempo vivo, con avatares que recuerdan a los personajes del notorio repertorio de Nintendo resuelto en 2006.
Este formato no pretende ser una réplica exacta de los jugadores o del entorno, sino una reinterpretación simpática de los mismos. Los avatares tienen cabezas desproporcionadamente grandes y pelotas de tamaño exagerado, rudimentos que, adicionalmente de aumentar el parecido con los videojuegos, facilitan el seguimiento de los movimientos y acciones en la cancha.
El principal motivo detrás de esta audaz propuesta es, fundamentalmente, el de esquivar las limitaciones impuestas por los derechos de transmisión televisiva, que en mercados como España son exclusivos de cadenas como Eurosport. Al optar por una diversión animada de los partidos, la estructura del torneo logra ofrecer una alternativa gratuita para los aficionados sin infringir los contratos existentes.

Los responsables del podcast gachupin sobre IA 'Monos Estocásticos' destacan de esta propuesta el hecho de que "la IA permite retransmitir partidos sin respaldar derechos" y añaden que "Javier Tebas tiene un nuevo enemigo manifiesto", en relato al presidente de la Ataderas de Fútbol Profesional. "Chapón al fútbol puede ser una killer app", sentencia un usufructuario en X.
Aunque la iniciativa ha sido aceptablemente recibida en universal, algunos aspectos técnicos han generado críticas. En ocasiones, el audio flamante de los partidos no se sincroniza con las animaciones, y los avatares presentan movimientos extraños que recuerdan a los errores de videojuegos antiguos. Sin secuestro, estos inconvenientes no han opacado el entusiasmo de los aficionados.
Este maniquí no sólo democratiza el comunicación a los encuentros, sino que asimismo representa una oportunidad para reinventar la forma en que se consume el deporte y así atraer, de paso, a un manifiesto más bisoño que podría no estar interesado en el tenis tradicional.
De hecho, el Australian Open no es el primer evento deportivo en cotejar con este tipo de transmisiones. La NBA ya había explorado esta idea en el partido navideño entre los San Antonio Spurs y los New York Knicks, que fue emitido con personajes de Disney como protagonistas.
En la misma onda, la NFL (Ataderas Franquista de Fútbol Amerindio) ya ha colaborado con Pixar para alegrar partidos con los personajes de Toy Story. En palabras de Drew Carter, productor de esta retransmisión:
"Es una gran oportunidad para presentar personajes y eventos de una forma que atraiga tanto a los fans tradicionales como a una nueva audiencia".
Imagen | Australian Open mediante IA
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