el 70% se escuda en que su productividad no ha bajado

Todos los empresarios esperan que sus empleados den el 100% de ellos mismos y consigan tener una productividad máxima en el día a día. Esta fue una de las razones por las que se abogó por el regreso a la oficina y renunciar el teletrabajo. Pero la Vivientes Z ha contrario la forma de no trabajar tanto, pero si parecer que están siendo muy productivos: la técnica task masking.

Con el teletrabajo podíamos ver como muchos trabajadores de la Vivientes Z podían ir mucho más relajados con sus tareas dedicando más tiempo a ellas de lo que de verdad necesitaban. O incluso que si acababan las tareas ayer podían tomarse un refrigerio. Ahora en la oficina esto cambia por completo al estar con supervisión.

Los jóvenes no quieren más trabajo del que ya tienen

En las redes sociales, como en TikTok, ya hemos gastado como algunos influencers hablan abiertamente de esta nueva organización a desarrollar en el teletrabajo que se ha aguado como task masking. Su funcionamiento es sencillo, ya que solo habrá que hacer creer a los jefes que están haciendo más trabajo del que de verdad tienen. Con esto consiguen que tengan una mejor impresión de ellos o mostrar una veterano productividad.

Las estrategias para conseguir este impresión se basan en ir con muchos papeles en la oficina de hacia lo alto con destino a debajo o incluso teclear muy robusto para que todos sepan que estás trabajando. Un estudio recogía que un 36% de los trabajadores encuestados habían hecho en alguna ocasión task masking para engañar a los jefes con el objetivo de que estaban trabajando mucho.

No camuflan una mala productividad. El 70% de los encuestados que hacían el task masking reconocen que su productividad no había variado con esta organización, sino que incluso era veterano que el del resto de compañeros. Esto se debe a que las tareas encomendadas las podían hacer, e incluso ayer del tiempo estipulado. Esto hace que nos volvamos a proponer si la marcha de ocho horas sigue teniendo sentido con los avances tecnológicos.

Entonces... ¿por qué se hace el task masking si se cumplen objetivos? Precisamente el hecho de escasear resaltar por encima de otros compañeros provoca este tipo de actitudes. Un práctico en bienes humanos apuntaba a que "creo que todos quieren hacer un poco de autodefensa profesional de esa guisa, y cuando estás en una oficina física, esa defensa está mucho más actuada. Amo una buena diligencia, pero creo que es por eso que trabajar desde casa es superior, porque reduce las teatralidades y enfatiza y prioriza los objetivos".

Que no el asignen más trabajo. Otro punto relevante en este sentido es que si un trabajador acaba todas sus tareas ayer de la marcha establecida en pacto, seguramente le va a meter una veterano carga de trabajo con el mismo sueldo. Esto es poco que no están dispuestos a hacerse cargo los trabajadores al no estar dispuestos a estar sobrecargados de trabajo. Es por ello que se debe 'aparentar' el estar muy ocupado para que no asignen más tareas si estás con los brazos cruzados.

Pero claro, aparentar que estás ocupado genera estrés. No es comprensible estar para hacia lo alto y para debajo en una oficina con papeles o el portátil en el articulación o incluso estar tecleando irresoluto de sí cierto mira para comprobar lo que estás haciendo. Esto puede llevarnos a un aberración de burnout al escasear estar en alerta constante en para estar resaltando o mostrando una imagen diferentes delante los encargados.

El hecho de estar quemándose en el trabajo incluso va a afectar finalmente a la empresa en sí y a los rangos superiores. Esto hace que se tenga que proponer de guisa conjunta el maniquí profesional, seguramente facilitando la flexibilidad en el ámbito profesional.

Imágenes | Campaign Creators Arlington Research

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