Durante años decidí trabajar pocas horas al día, vivir con poco y tener tiempo libre. Los que no me entendían, ahora me dan la razón

Ya he compartido en otros reportajes cómo gracias al  teletrabajo y pude ser nómada digital desde los abriles 2010 y cómo así además pude poblar en otros países distintos o correr con una mochila por regiones del mundo como América del Sur, América Central o el Sudeste Oriental, mientras trabajaba. En universal, poco conveniente complicado porque la conexión a internet contra constantemente no siempre muy buena.

Asimismo he compartido que trabajaba pocas horas durante unos abriles porque quería tener tiempo libertado para estudiar posgrados, idiomas o hacer voluntariados y actividades de ocio más sociales. Mucha multitud no comprendía por qué trabajaba menos horas y, por consiguiente, ganaba menos que un sueldo intrascendente (ya bajo en sí en aquellos abriles), en vez de trabajar más horas para aventajar más.

Yo tenía varias razones. Por un banda, quería seguir estudiando. Y, aunque ya tenía que trabajar para poder sufragar mis gastos, quería tiempo libertado para poder seguir formándome. Y además para ilustrarse idiomas y para tener más horas del día para ilustrarse nuevas curiosidades o advenir más tiempo con conocidos.

En aquellos momentos, muchas personas que no me comprendían, y ahora muchas de esas personas son partidarias de las ideas de las que tanto acento la Concepción Z y además hicimos muchos millennials: quieren flexibilidad gremial, trabajar menos horas y, simplemente poblar con menos.

El tipo de poblar para trabajar o trabajar para poblar

Hay estudios que afirman que a diferencia de los boomers, los millennials y Gen-Z no escogen un trabajo por el salario, sino que esperan mucho más de sus empleadores y que la lozanía prefiere empresas responsables socialmente, antaño que den grandes salarios. Asimismo se acento mucho de que la Concepción Z está "quemada" y dispuesta a dejar sus empleos, ya que los jóvenes se han hartado de la inflexibilidad de sus jefes.

Incluso, hemos gastado cómo muchas personas han decidido dejar sus empleos en estos últimos abriles, en grandes empresas, antaño de retornar a la oficina, cuando sus jefes obligaron a dejar de banda el teletrabajo. Los estudios apuntan a que son los mejores talentos, encima, quienes se han ido de las grandes empresas.

Personalmente, sigo pensando que aquella atrevimiento que tomé en mi lozanía fue estupenda. Tuve el tiempo libertado que quería para ilustrarse, para disfrutar tiempo de ocio con nuevas conocidos en mis países de destino, para correr por muchos lugares... encima cuando tienes más tiempo libertado al día, hay más formas de deteriorar menos boleto.

Ha pasado a ser una tendencia de la que se acento mucho ahora de aprender a vivir con menos para, así, escasear trabajar menos y poder disfrutar más de la vida. Personalmente, siento que pago menos cuando estoy más relajada y que en épocas de mucho trabajo, cuando llega el tiempo libertado solo quiero disfrutarlo aunque sea gastando mucho más boleto.

Hay estudios universitarios que afirman que "las largas horas de trabajo son un engendro omnipresente en la mayoría de las organizaciones y empresas donde el tiempo dedicado al trabajo, que comprende las tareas principales del trabajo, tareas relacionadas, desplazamientos y viajes, es demasiado holgado y perjudicial para la sanidad de los trabajadores directa o indirectamente. Encima, los estudios han demostrado los enseres negativos de las largas horas de trabajo en los riesgos de enfermedades varias e incluso pueden arrostrar a viejo consumo de trinque y tabaquismo.

Deteriorar menos en la vida y el ocio

Por ejemplo, tenemos más tiempo para cocinar o hacer ciertas tareas que nos ahorran boleto (y cuando estamos muy apurados, muchas más veces podemos escasear comprar comida ya preparada). En este caso, tengo conocidos que si la ropa se les estropea, ellas lo arreglan, aunque sea complicado, mientras que otras conocidos que trabajan mucho delegan incluso a veces el lavado de ropa a lavanderías, lo que les supone un costo extra en las actividades del día a día o contratan a cualquiera para que les limpie su casa solo por la desidia de tiempo de hacerlo. 

Por otro banda, a la hora de correr podía adaptarme admisiblemente a los transportes más baratos (cuando estamos trabajando con horarios más atados no podemos tomar cualquier autobús o avión, sino el que se adapte a nuestros horarios, aunque cueste más boleto).

Asimismo podía usar mucho más de la patrimonio colaborativa a la hora de correr (en plataformas como Couch Surfing, el objetivo de la plataforma no es economizar boleto, como tal, sino compartir tu tiempo con multitud, pero si tienes que trabajar tus ocho o más horas al día, ya no puedes destinar tiempo de calidad a tus anfitriones).

Incluso, desde el punto de clarividencia de la tranquilidad, yo lo veo además a la hora de compartir suelo o residencia con colegas. Es poco sencillo cuando se comparte una casa entre personas que están relajadas, aunque a veces pueda sobrevenir ciertos momentos de desencuentros o discusiones. Cuando trabajamos muchas horas y estamos estresados, no siempre es ideal compartir casa. A veces queremos montar y estar tranquilos. Y compartir hace la vida más ocasión.

Por ejemplo, durante aquellos abriles, yo compartí suelo con varias personas en Sarajevo, en Marruecos o en Bogotá. Y encima recibíamos multitud en casa a través de Couch Surfing. A mí me encantaba, aunque a veces pudiéramos discutir. Ahora no siempre me vería capaz de compartir mi casa con tanta multitud y menos con tantos visitantes. Por el agotamiento que traigo algunos días. Y aquella forma de vida hacía que el costo de mis alojamientos fuera despreciado y me permitió conocer a mucha multitud que pasaron a ser conocidos y me alojé en sus casas en otros viajes, por lo que correr me salía más despreciado.

Hay estudios y teorías que apuntan a que cuando una persona trabaja mucho puede llegar a gastar más en ocio. Si tenemos poco tiempo libertado queremos intentar usar al mayor las pocas horas libertado. Si estamos más descansados, podemos relajarnos más en el ocio.

Brad Aeon, profesor adjunto de la Colegio de Ciencias de la Diligencia de la Universidad de Quebec en Montreal afirma que "una cosa que es constante en el ocio es que siempre se ha contrastado con el trabajo". En la ejercicio, ahora, dice el diestro que "quienes más se quejan de no tener suficiente tiempo libertado son los ricos y los que tienen un nivel educativo” y que esto alimenta la idea de que debemos maximizar la “utilidad hedónica” del ocio, o el valía del disfrute, cuando positivamente tenemos poco de tiempo libertado, y hacer que cada hora cuente. Esto se traduce a un ocio que muchas veces es más costoso.

Imagen | Foto de NegiPho en Unsplash

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