deberá leer la sentencia en su canal y pagar 12.000 euros por sus insultos

Dalas Review es uno de los creadores de contenido más importantes de España (y incluso uno de los más polémicos). Con millones de suscriptores detrás, este creador destaca por favor tenido una gran cantidad de encontronazos con diferentes personas del mundo de internet.

Tanto es así que por sus palabras ha tenido que concluir en los juzgados. Ahora, el Supremo ha ratificado una condena histórica que le impone una indemnización de 12.000 euros por vulnerar el honor y la imagen del padre de su expareja. 

Una condena histórica en el mundo de YouTube

Al padre de su expareja, Miare, fueron muchas las malas palabras que le dedicó en diferentes vídeos de su canal. Varios primaveras posteriormente, la conciencia ha respondido dándole la razón a su antiguo suegro, y ya no junto a arbitrio alguno al favor escaso el detención tribunal.

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Ya en 2023 nos hacíamos eco de este condena que obligaba a abonar 12.000 euros al padre de su expareja y incluso a borrar los diferentes vídeos donde soltaba los insultos. Pero tuvo un arbitrio en presencia de el Chancillería de Primera Instancia 5 de Barcelona que se resolvió en 2024, rechazándolo y confirmando la pena.

Pero Dalas volvió a acudir en presencia de el Tribunal Supremo. Finalmente, la sala de lo civil ha desestimado el arbitrio, y esta condena histórica en el ámbito de internet se ha confirmado. Y tendrá que ejecutarse.

En concreto, Dalas deberá abonar la cantidad de 12.000 euros al padre de su expareja. Encima, deberá borrar los vídeos donde se mostraban estos insultos a toda su audiencia, donde se veían palabras como “maltratador”, "enfermo mental", "atacante de mierda". Unos insultos a los que el tribunal dio relevancia por haberlos dichos delante de una comunidad de adolescentes.

Tal y como ha recordado Miare a través de su cuenta de X, donde pide una gran difusión de esta condena, Dalas debe hacer pública la sentencia y difundirla a través de su canal de YouTube una vez por semana durante un mes sereno. Encima, va a tener que abonar (a salvo de los 12.000 euros) las costas del arbitrio en presencia de el Supremo.

Hablamos de una condena histórica, pues es la primera vez que se condena a un youtuber por sus publicaciones difamatorias. Sobre todo amparándose detrás de la atrevimiento de expresión.

Para el togado “Nadie con una inteligencia media puede pensar que con la excusa de la atrevimiento de expresión se pueda manifestar toda esta serie de improperios reconocidos como tales por la RAE, para independientemente manifestarlas en las redes sociales, sin que el receptor no se sienta agredido y que el sistema no reaccione”. De esta modo, la conciencia justificaba la privación de vincular a eliminar estos vídeos donde se detectaron un total de 82 insultos diferentes que fueron analizados por la propia RAE.

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