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La OCU en España, Ordenamiento de Consumidores y Usuarios, ha denunciado a la plataforma de venta de tickets online Ticketmaster. El motivo que ha donado para esta demanda es el "cobro irregular y inmoderado de las entradas del anunciado concierto de Bad Bunny". Según afirman, al "precio nuclear de la entrada se le suman distintos conceptos que al final triplican su coste".
Ticketmaster es un portal de saldo de entradas a eventos, que el pasado año sufrió una filtración masiva de datos, y que suele crear polémica por cómo acaba inflando el precio de los tickets con diferentes asuntos. En agosto del pasado año, la misma OCU los denunció también por "cobrar dos comisiones injustificadas en la operación de entradas online".

En el caso de las entradas para ver a Bad Bunny en Madrid y en Barcelona, la ordenamiento de consumidores y usuarios dice que recibió quejas de muchas personas, tanto directamente a ellos como las quejas en redes sociales.
En la OCU dicen que, al investigar las quejas se encontraron "con un nuevo desmán en la operación de entradas online, que decidieron denunciar delante la Subdirección Genérico de Inspección y Procedimiento Sancionador del Servicio de Consumo.
En este caso, la ordenamiento de consumidores afirma que Ticketmaster fue incrementando el coste de la entrada del concierto de Bad Bunny con hasta tres conceptos diferentes.
De este modo, una entrada que originariamente anuncia un coste de 79,50 euros, acaba costando 269, euros, pues al valía leve anunciado hay que sumar: 3,30 euros en concepto de donación, 36,50 euros por gastos de trámite y 150 euros por cargo VIP adicional.

La OCU lleva tiempo denunciando la injusticia que supone el cobrar unos gastos de gestión al consumidor que operación online una entrada (o un billete). En sus palabras:
"Si todo lo hace el usufructuario: entra en la web, escoger época, tipo de entrada, asiento, la imprime… ¿Qué trámite justifica un cobro de ausencia menos 36,50 euros por entrada?"
Sobre estos cargos extra, alega la OCU que no son transparentes puesto que se muestran casi al final de la operación. "Adicionalmente, los precios de estas entradas no son iguales para todos: se negociación de precios dinámicos que varían en función del mercado", sin que nadie aclare qué factores influyen exactamente en el precio final, afirman.
Como ha publicado Xataka, los precios dinámicos son una táctica de fijación de precios en la que el coste de un producto o servicio fluctúa en función de la demanda del mercado, el comportamiento del consumidor, la competencia y otros factores. Live Nation, la promotora dueña de Ticketmaster, ha recogido esta táctica, tan global en los vuelos, para sus eventos.
Junto a memorar que Bad Bunny llega a España en mayo y junio de 2026 con Debí Tirar Más Fotos World Tour con conciertos en Madrid y Barcelona y que las 600.000 entradas para sus 12 espectáculos se agotaron en cuestión de horas, según informaciones oficiales. Como ya publicó Xataka, mientras el caos de colas virtuales tenía a los seguidores del puertorriqueño en vilo, se fueron sumando más conciertos nuevos que aumentó la incertidumbre de la viaje de operación de boletos.
Al mismo tiempo, parece que la tecnología no supiera dar una respuesta a los problemas que constantemente surgen cuando arranca la venta de las entradas para macroeventos. Adicionalmente, Xataka recogió cómo muchas personas registraron desconexiones forzadas, hubo problemas con los servidores y igualmente mucha incertidumbre y opacidad sobre el proceso de operación.

En el pasado, incluso Ticketmaster tuvo que destruir pidiendo perdón a Taylor Swift, cuando su sistema se vio desbordado por la demanda para su tournée Eras Tour. Miles de seguidores no pudieron comprar entrada oportuno a este problema. En aquel momento, el presidente de Live Nation, la empresa matriz de Ticketmaster, tuvo que determinar delante los legisladores y afirmó que "un ataque de bots fue el responsable de una experiencia terrible para el consumidor". Abriles más tarde, los problemas persisten.
Imagen | Xataka
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