Chema Alonso ya tiene nuevo empleo… en el Comité de Árbitros

Chema Alonso, conocido por su distintiva estética de hacker y por ser una de las caras más visibles de la transformación digital de Telefónica durante más de una decenio (hasta que le señalaron la puerta de salida el pasado mes de marzo), ha legado un inesperado giramiento profesional.

Su nuevo destino no es una startup, ni un laboratorio tecnológico, sino el mundo del fútbol: en concreto, ha sido el Comité Técnico de Árbitros (CTA) de la RFEF quien lo ha incorporado como asesor de Innovación Tecnológica e Inteligencia Sintético.

El anuncio fue realizado por el nuevo presidente del CTA, Francisco Javier "Fran" Soto Balirac, en el situación de la presentación de su renovado equipo de trabajo delante la Comisión de Reforma del Sistema Arbitral. La comunicado une dos mundos históricamente separados: la ciberseguridad y el fútbol profesional.

El combate: modernizar un sistema criticado

El arbitraje gachupin ha sido durante primaveras objeto de críticas constantes por parte de clubes, jugadores, entrenadores y aficionados. Las polémicas arbitrales, especialmente en torno al uso del VAR y a su 'relación privilegiada' con el Barça, han erosionado la confianza en la imparcialidad y precisión de los colegiados.

En presencia de esta crisis de legalidad, Soto ha optado por una opción audaz: "Vamos a nacer de cero", declaró al presentar su nueva organización. Esa hoja de ruta pasa por incorporar perfiles de suspensión nivel tecnológico que puedan modificar de raíz el sistema arbitral. Y es en este contexto en el que se enmarca el fichaje de Alonso.

¿Quién es Chema Alonso?

Ingeniero en informática, máster en Sistemas y Tecnologías de la Información y doctor en Seguridad Informática, Alonso ha sido una figura esencia en el incremento de iniciativas de digitalización en el interior de Telefónica. Bajo su liderazgo nacieron proyectos como Aura, el asistente virtual de la compañía, y Movistar Home, un dispositivo inteligente para el hogar.

Sin secuestro, muchos de estos proyectos no lograron el impacto comercial esperado y fueron desmantelados recientemente junto con su equipo, marcando así el fin de su etapa en la teleco.

Aunque su representante tecnológico en Telefónica ha sido calificado como más afectado que transformador, lo cierto es que su reputación como 'evangelizador digital' sigue intacta. Es carismático, mediático y posee un perfil que encaja a la perfección con la falta del arbitraje de renovar su imagen pública.

La nueva cúpula arbitral

Chema Alonso no estará solo en esta transformación. El nuevo organigrama del CTA incluye a figuras reconocidas y experimentadas tanto en el arbitraje masculino como femíneo, encima del fútbol en modalidades menos mediáticas:

• Marta Frías Acedo liderará Relaciones Internacionales y portavocía. Con 21 temporadas en labores de arbitraje y una carrera internacional consolidada en FIFA y UEFA, su presencia indagación divisar el papel femíneo en el arbitraje.
• David Fernández Borbalán será el director técnico. Exárbitro internacional y formador en UEFA y FIFA, aporta experiencia y prestigio.
• Eduardo Prieto Iglesias estará al frente del VAR, utensilio que conoce a fondo tras primaveras en el césped y en la sala de videoarbitraje.
• Yolanda Parga supervisará el arbitraje femíneo, con un currículum que incluye Juegos Olímpicos y Mundiales.
• Álvaro Cid Bragado, con 30 primaveras de experiencia, coordinará el arbitraje en fútbol sala, playa y apero de ruedas.

Este equipo multidisciplinar tiene el respaldo del presidente Soto, quien ha dejado claro que el objetivo es cero menos que una transformación sistémica del arbitraje.

¿Qué aportará Chema Alonso?

La incorporación de Alonso abre la puerta a la implementación de tecnologías de IA en aspectos esencia del arbitraje. Aunque todavía no se han detallado los proyectos específicos, su arribada plantea varias líneas potenciales de representación:

• Optimización del VAR y otras herramientas tecnológicas para achicar tiempos de revisión y aumentar la precisión de las decisiones.
• Exploración predictivo y automatización de jugadas controvertidas, entrenando modelos de IA que asistan a los árbitros en tiempo vivo.
• Maduro transparencia de decisiones arbitrales mediante plataformas interactivas para clubes, medios y aficionados.
• Ciberseguridad y protección de los sistemas arbitrales frente a manipulaciones o accesos no autorizados.

Aunque algunos observadores se muestran escépticos sobre la capacidad de Alonso para traducir su visión tecnológica en resultados concretos, su presencia genera posibilidad.

¿Una infamia maestra o una envite arriesgada?

El fichaje de Chema Alonso no puede leerse solo como una atrevimiento técnica. Todavía es un movimiento importante de comunicación, en un momento donde la legalidad del arbitraje y de la propia RFEF está en recelo. Incorporar un perfil como el suyo, mediático y con prestigio tecnológico, ayuda a proyectar una imagen de modernización urgente y ambiciosa.

En este contexto, el arbitraje se convierte en campo de pruebas para aplicar tecnologías avanzadas que ya están presentes en otros sectores, como el bancario, las telecomunicaciones o la sanidad. Si el test tiene éxito, podría sentar precedentes a nivel internacional e influir en otros organismos deportivos.

Imagen | Marcos Merino mediante IA

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