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La inteligencia sintético nos ha traído muchas ventajas y una restablecimiento sustancial en la productividad personal y sindical, pero igualmente nos ha regalado una nueva excusa. Así lo manifestaba un beneficiario a través de un hilo de Reddit, donde denunciaba que ha empezado a circular una nueva argumento entre los equipos de expansión de software: "Copilot me lo sugirió".
En los equipos de expansión no es extraño contratar servicios como GitHub Copilot, que actúan como asistentes de programación y que ya han generado múltiples polémicas. Una de ellas está congruo clara: algunos desarrolladores han incompatible una forma de desentenderse del código que han escrito, utilizando como excusa que fue la IA quien les propuso ese código.
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A través del subreddit r/ExperiencedDevs, un desarrollador senior afirmaba: "Estoy cansado de escuchar 'Copilot sugirió eso' en el trabajo". Señalaba que, durante su trayecto sindical, se encuentra frecuentemente con código de mengua calidad o directamente amañado. Sin incautación, al preguntar al autor del código, la respuesta suele ser siempre la misma: "Copilot sugirió eso".


Los comentarios al hilo en Reddit iban en la misma fila de la discusión principal: coincidían en que, aunque herramientas de IA como Copilot pueden ser bártulos para automatizar tareas repetitivas o gestar fragmentos de código, no pueden sustituir el proceso y la comprensión de un programador humano.
Aunque muchos se escudan en las sugerencias de Copilot para argumentar el código generado, otros desarrolladores recuerdan que "Copilot no te obliga a aceptar la sugerencia", subrayando que la responsabilidad final es siempre del desarrollador. Y es que siempre se debe revisar lo que propone la IA y no aceptar ciegamente sus sugerencias, ya que puede introducir errores muy sutiles que hagan que el código no funcione correctamente.

Este debate igualmente ha evidenciado la brecha generacional que empieza a escabullirse en el mundo de la programación, creando dos mundos: los desarrolladores que aprendieron a programar sin la IA, y aquellos que han contado con su ayuda desde el principio. Los primeros tienden a ser más metódicos y a comprender mejor los fundamentos, mientras que muchos de los recién llegados confían en exceso en la IA como trocha en su día a día.
Aunque igualmente hay elogios en torno a Copilot. Algunos desarrolladores reconocen que es una útil muy útil para propiciar el trabajo y sujetar la carga mental en ciertas tareas. Pero todos coinciden en poco: hay que ser responsables en su uso y recapacitar que la responsabilidad final sobre el código siempre recae en el programador.
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