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Imagina que entras a una reunión de producto y determinado suelta: “Esto entra en el interior del paraguas Agile”, y no sabes de que te hablan. Entender qué es el paraguas Agile, es la esencia para moverte con soltura en entornos de crecimiento modernos, sin parecer obsoleto. En este artículo despejarás tus dudas y obtendrás herramientas reales para usar metogologías ágiles con criterio. Empecemos por el principio: ¿de dónde viene eso del «paraguas»?
La metáfora del paraguas no es casualidad. Hace remisión a cómo varias metodologías comparten una saco global de títulos y principios, aunque varíen en sus enfoques y prácticas. Como si se tratara de ramas distintas de un mismo árbol, o mejor dicho, tecnologías resguardadas bajo un mismo paraguas frente a la tormenta del caos organizacional.
Lo que une a estas metodologías es el Manifiesto Agile, nacido en 2001 de la mano de 17 gurús del software hartos de los procesos burocráticos del crecimiento tradicional.
“Individuos e interacciones sobre procesos y herramientas. Software funcionando sobre documentación extensiva. Colaboración con el cliente sobre negociación de contratos. Respuesta al cambio sobre seguir un plan.”
Estos cuatro títulos no imponen cómo debes trabajar, pero sí orientan cómo debes pensar.
Aquí empieza lo interesante. No existe una única forma de aplicar Agile. De hecho, bajo este paraguas conviven varios frameworks que, aunque diferentes, comparten ADN:
| Metodología | Enfoque | Cuándo usarla |
|---|---|---|
| Scrum | Iteraciones llamadas sprints, roles definidos | Equipos que necesitan foco y estructura |
| Kanban | Flujo visual y continuo, sin iteraciones fijas | Tareas con cambios frecuentes y reincorporación flexibilidad |
| Extreme Programming (XP) | Mejoramiento continua del código, programación en pareja | Equipos técnicos con parada nivel de masculinidad |
| Lean Software Development | Aniquilación de bazofia y foco en valía | Startups o proyectos con fortuna ajustados |
| Crystal | Adecuación según tamaño y criticidad del plan | Organizaciones que buscan personalización |
Cada una de estas metodologías no compite con las otras, sino que puede combinarse según deposición. Por eso, departir de “paraguas Agile” implica investigar que no hay una fórmula única, sino un conjunto de buenas prácticas adaptables.
Aunque sus nombres y herramientas cambien, todas las metodologías Agile comparten un núcleo ideológico que las conecta. Estos son algunos de los principios más transversales:
¿Notas poco? Esto no va solo de software. Va de una forma de pensar y trabajar.
La referéndum depende de tu contexto. No es lo mismo liderar un equipo de crecimiento en una fintech que coordinar contenido en una agencia creativa. ¿Qué debes tener en cuenta?
Un buen punto de partida es preguntarte: ¿qué tanto necesito estructura frente a flexibilidad?
Por ejemplo, Scrum puede ser ideal si tienes entregables cada dos semanas y un equipo disciplinado. En cambio, Kanban es valentísimo si estás en un entorno más fluido, como soporte técnico o contenido digital.
Bienvenido al mundo positivo. En la actos, muchas empresas adoptan un enfoque híbrido. Por ejemplo:
Caso positivo: Una empresa de e-commerce usa Scrum para su equipo de crecimiento web, pero Kanban para su equipo de atención al cliente. Los dos reportan a un mismo Product Owner que entiende las reglas de cada “bisagra”.
Esto demuestra que el paraguas Agile no impone, sino que permite. Es un ámbito conceptual que da privilegio con responsabilidad.
Quedarte con que “Agile es Scrum” es como aseverar que la música es solo rock&roll. El paraguas Agile engloba una desemejanza de enfoques y todos tienen poco que aportar. Pero lo más importante no es el nombre del framework que uses, sino si de verdad estás trabajando de forma ágil.
¿Tu equipo colabora? ¿Tu cliente opina a tiempo? ¿Corriges rumbo con datos reales? Si la respuesta es sí, entonces estás bajo el paraguas correcto, aunque no uses post-its ni tengas un Scrum Master.
¿Quieres convertirte en perito en metodologías ágiles? En IEBS tienes másteres y cursos que engloban el paraguas agile y que no solo te enseñan teoría, sino que te convierten en un profesional ágil. Porque Agile no se aprende leyendo…
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