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Cuando creíamos que todo en el mercado de los teléfonos ya estaba dicho, Huawei presentó su Mate XT, un teléfono plegable de tres pantallas ultraligero, como su mejor propuesta para 2025. No pasó desapercibido. De pronto, el mundo estuvo frente al primer teléfono comercial de tamaño tipificado que podía doblarse como tríptico y convertirse en una tablet de 10 pulgadas en solo dos pasos.
El interés por el Huawei Mate XT aumentó todavía más en cuanto se reveló su precio. Hay que enriquecer aproximadamente 3,600 dólares para disfrutar de esa enigmática pantalla que se dobla en tres. La guarismo sobresale incluso adentro del hornacina de los teléfonos plegables, que de por sí suelen ser costosos. Los entusiastas de los teléfonos están llenos de dudas sobre la experiencia en un teléfono con tales prestaciones, y pocos pueden responderlas. ¿Está justificado su precio? ¿La experiencia de uso perfeccionamiento? ¿Tiene desventajas? ¿Es necesario? En WIRED en Gachupin pudimos revisar el teléfono, realizar algunas pruebas y comprobar cómo se desempeña en el día a día.
Quiero ser directo: un teléfono que ofrece tres modos distintos de pantalla OLED sin ocasión a dudas enriquece la relación de un becario con el mundo digital. El formato tradicional se sigue usando para mensajes y redes sociales, las dos pantallas (7.8 pulgadas) para percibir o trabajar con documentos o tablas, y el modo de pantalla completa para cuando estás en casa y quieres ver una serie o retozar. En un mundo donde la mayoría examen un teléfono compacto, el Huawei Mate XT parece un gadget raro, pero cuando lo tienes en tus manos, te hace percibir que no necesitas ningún otro dispositivo.
El smartphone está correctamente hecho y es tan sólido como la tecnología plegable lo permite en estos momentos. La pantalla del Mate XT, en cualquiera de sus configuraciones, no se mueve ni “percha”. No es sorpresa. La marca lleva ya seis abriles trabajando en su tecnología plegable. Es cierto que hay una pequeña curva de enseñanza para dominar la técnica del plegado (nunca se me quitó el miedo a romperlo por un mal movimiento), pero, en cuanto un becario se acostumbra, el resto es historia. Aunque Huawei dice que el teléfono puede resistir golpes normales, no recomendamos poner a prueba su integridad.
En cuanto a potencia, se comporta como un teléfono tope de escala. Lleva consigo un chip Kirin 9010 de ocho núcleos (el mismo que su flagship Huawei Pura 70), 16 GB de memoria RAM y un Terabyte de almacenamiento. La compañía se ha asegurado de que, en cuanto a especificaciones, el teléfono se mantenga actualizado por varios abriles. Estos números se traducen en un rendimiento fluido tanto en apps de ofimática, tiraje de video y cualquier red social. La potencia del chip sobresale en la multitarea cuando se combina con en el modo de 10 pulgadas.
Este teléfono no usa Android, sino su HarmonyOS, que es como un sistema eficaz igual, aunque suelto de restricciones geopolíticas. Está correctamente pulido para especular con los tres formatos de pantalla. Me agradó descubrir que la mayoría de las apps nativas incluso aprovechan las características del Huawei Mate XT. En cuanto a proceder sin Google, eso ha quedado en el pasado. En sinceridad, es congruo sencillo obtener aplicaciones tradicionales como Gmail o YouTube desde la propia tienda de Huawei.
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