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Hace unos días veíamos cómo México quiso frenar Airbnb permitiendo los alquileres solo la porción del año y la empresa presentó un amparo lícito contra esto. En la Ciudad de México, la regulación de los alquileres vacacionales se realiza a través de modificaciones a las leyes de Turismo, Vivienda y Reconstrucción Integral. La reforma entró en vigor el 15 de octubre de 2024.
En 2022, la caudal había firmado un polémico acuerdo con Airbnb y la ciudadanía salió a la calle para protestar, alegando que la empresa contribuía al desplazamiento y la gentrificación. Y ahora la ciudad tiene un cambio de planes de cara al Mundial de Fútbol: una pausa a las restricciones.

Según alegan miembros del Congreso de la Ciudad, la arribada masiva de turistas para el Mundial de Fútbol 2026, implicará una ingreso demanda de hospedaje y ahí sí van a escasear de alojamientos de pisos turísticos a través de Airbnb y de otras plataformas.
Por el momento, se ve que a 16 meses del inicio de la Copa del Mundo, la CDMX aún enfrenta desafíos logísticos secreto, en materia de hospedaje y movilidad. Es ya una ciudad enorme con un campo de acción metropolitana inmensa y se verá con millones de personas más durante varios meses en verano del próximo año.
Según el Coordinador del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) en el Congreso de la CDMX, Jesús Sesma, se retraso que al menos 5.5 millones de visitantes lleguen a la CDMX para el Mundial de Futbol 2026.
Este mismo hombre ha recordado que los hoteles tradicionales no podrán cubrir la demanda y que las plataformas digitales representan una alternativa viable para aumentar la capacidad de hospedaje en la caudal.

Como han compartido en X, "con motivo del turismo esperado para el Mundial 2026, el diputado Chucho Sesma PVEM presentó una iniciativa para suspender las reformas aplicables a la Ley de Turismo, Vivienda y Reconstrucción de la caudal del 1 de junio al 31 de agosto". Hace unas semanas el Gobierno de Clara Brugada ya adelantaba su objetivo de aparecer a originar una ‘convivencia sana’ entre el sector hotelero y Airbnb mediante la regulación de plataformas digitales.
Cerca de recapacitar que, entre otras medidas, el gobierno de la Ciudad de México limitó a 180 días al año, mayor, como tiempo para poder arrendar una vivienda cada año como locación vacacional.
La iniciativa asimismo prohíbe que las viviendas de carácter social y las que han sido reconstruidas con medios públicos sean rentadas con este maniquí temporal. Es una medida popular en muchos lugares del mundo.

Hace unas semanas, Airbnb informó que presentó un amparo contra las reformas en la Ciudad de México que restringen los alquileres temporales. “Para continuar apoyando a la comunidad de anfitriones y en verdad promover una igualdad de oportunidades y condiciones a través de una regulación desafío, Airbnb presentó una demanda de amparo en contra de la Ley de Turismo de la Ciudad de México y su Reglamento”, indicó en un comunicado la empresa.
Según ellos, "aproximadamente del 80% de anfitriones en la ciudad nada más comparten un solo espacio en la plataforma; 78% de los anfitriones indicaron que ofrecer su espacio no es su fuente principal de ingresos sino más correctamente una forma de obtener ingresos extra; y 53% indicó que el ingreso obtenido a través de Airbnb les ha permitido quedarse en sus casas".
Imagen | Foto de carlos aranda en Unsplash
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