Uno de cada cinco jefes ha pensado en renunciar porque los trabajadores de la Generación Z están sacando de quicio a los mayores

Las personas de la Engendramiento Z  (nacida entre 1997 y 2012) son ahora adultos que comienzan a formar parte de la fuerza sindical. Inmediato con los millennials, Forrester estima que la Engendramiento Z constituirá el 74% de los trabajadores para 2030. Como cada nueva reproducción de empleados llegan con conjunto diferente de actitudes y desafíos y pueden poner en jugada dinámicas muy comunes en las empresas, y, parece ser que está costando entenderse.

Hoy tenemos un nuevo y muy interesante estudio que apunta a que 1 de cada 5 jefes quiere renunciar a su puesto porque no soportan a los trabajadores jóvenes con los que tienen que hostilizar en sus empresas. 

Concretamente, "el 18% de los gerentes ha considerado renunciar adecuado al estrés que implica resolver a empleados de la reproducción Z. Los gerentes dicen que los empleados de la reproducción Z hacen un uso excesivo del teléfono y "demuestran una ética sindical deficiente", de acuerdo con las conclusiones de Intelligent.com.

Es importante señalar que muchos son, a su vez, los estudios que muestran que los trabajadores de la Engendramiento Z  están cada vez más agotados, y el 85% en España afirma sentirse abrumado en el trabajo. Parece ser que el choque entre generaciones está causando estragos al igual que una presentación a la vida adulta con unos precios de la vivienda altísimo que lleva a que los salarios no lleguen para hacer frente al coste de la vida. 

Los jefes dicen hacer esfuerzos para adaptarse

Intelligent.com encuestó a 1.000 gerentes estadounidenses que supervisan a empleados de la Engendramiento Z. Dos ​​tercios afirman que han modificado su estilo de trámite para adaptarse a los subordinados jóvenes, y el 75 % dice que este especie de existencia requiere más tiempo y capital. La fracción de los encuestados considera que el personal de la reproducción Z causa tensión entre otras generaciones en el sitio de trabajo.

El 27% de los gerentes evitaría contratar a la reproducción Z si fuera posible, y la fracción ha despedido a un subordinado de la reproducción Z. Las cifras son alarmantes.

El 51% de los gerentes informa que experimenta frustración adecuado a la trámite de empleados de la reproducción Z, y el 44% dice que resolver a sus empleados más jóvenes les causa estrés. 

Encima, los jefes dicen que supervisar a los empleados de la reproducción Z ha provocado engaño (en un 31%), decano carga de trabajo (esto afirma el 27%), privación de capital adicionales (26%), disminución de la productividad personal (20%), sentimientos de agobio (20%) y agotamiento (16%).

En genérico, la fracción de los encuestados consideran que sus trabajadores jóvenes, adicionalmente de mirar mucho su teléfono, se comunican de maneras poco profesionales (ya habíamos trillado otros estudios que la reproducción Z tiene su propio idioma, más informal, y eso no gusta en muchas empresas o que llegan a las entrevistas sin cuidar su vestimenta).

Faltan alinear las expectativas

Estos sentimientos de los jefes de generaciones mayores no tienen que ser exclusivamente causados por la aire de la inexperiencia, sino todavía en la errata de comprensión de los cambios laborales de los boomers o los Gen X. 

Dice el estudio que "parte de esta frustración y estrés puede provenir de una errata de afiliación de expectativas", como el asesor principal de educación y expansión profesional de Intelligent.com, Huy Nguyen. Él achaca todavía que la inexperiencia ha pasado varios abriles de su vida realizando tareas tras una pantalla, a causa de la pandemia.

“Si admisiblemente las habilidades como la comunicación, la trámite del tiempo y el trabajo en equipo son esenciales, vale la pena considerar que los recién graduados, especialmente los de los últimos abriles, han tenido menos oportunidades de desarrollar estas habilidades a través de métodos tradicionales como prácticas o trabajo en persona, en parte adecuado a la pandemia”, dice Nguyen.

Él considera que los empleados de la Engendramiento Z llegan con habilidades técnicas más sólidas que las generaciones anteriores, "pero pueden carecer de las experiencias prácticas adquiridas en los entornos laborales tradicionales".

Para evitar tanta frustración a los jefes y gerentes, el práctico recomienda que consideren "reevaluar sus expectativas para elogiar una orientación más estructurada". Él deje de que hay malentendidos y que lo mejor es organizar el flujo de trabajo y comunicarse abiertamente.

Imagen | Foto de Brooke Cagle en Unsplash

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