El empleo remoto en España no está muriendo, según este nuevo informe de Infojobs. De hecho, estamos mucho mejor que hace seis años

Durante los últimos meses, titulares y decisiones corporativas han alimentado la sensación de que el teletrabajo se desinfla: “cayó en picado”, “va cediendo cuota”, “fin del teletrabajo”, o empresas que anuncian la envés obligatoria a la oficina. Ese es el runrún. Sin secuestro, cuando pasamos del ruido a los datos, el cuadro es diferente: el teletrabajo, en España, no se está desplomando. Más aceptablemente, se estabiliza en niveles claramente superiores a los de la prepandemia y con ligeros repuntes en 2024–2025.

Qué dicen los números (y no el ruido)

• INE (EPA 2024): el 7,8 % de los ocupados trabajó desde casa más de la centro de los días (1,69 millones de personas), y otro 7,6 % lo hizo de forma ocasional (1,64 millones). En total, más de 3,32 millones de personas —más del 15 % de la población ocupada— trabajaron desde su domicilio. Es un aumento frente a 2023 y casi el doble que ayer del COVID.
• Pesquisa InfoJobs a población ocupada (PDF, 2025): una de cada cuatro personas declara que teletrabaja (≈25 %).
• Comparación europea: España sigue [ligerísimamente] por debajo de la media de la UE (9 % de teletrabajo “habitual” frente a ~8 % en España), pero aun así queda por delante de 16 países

¿Conclusión de esta fotografía? Hubo un pico pandémico inasequible de sostener, sí; luego llegó un ajuste; pero desde 2024 hay un cambio de tendencia con repunte. No estamos frente a una hecatombe del teletrabajo.

Ofrecimiento de empleo: menos hype que en 2020… pero muy por encima de 2019

En InfoJobs, entre enero y agosto de 2025, el 12 % de las vacantes incluyó teletrabajo (187.906 ofertas). Es menos que en 2024 (−19 %), pero triplica el tamaño de 2019: el teletrabajo se ha consolidado en el mercado de ofertas, aunque ya no crezca al ritmo pandémico. Por sectores, el de Informática y Telecomunicaciones es el gran motor: el 68 % de sus vacantes ofrece opción de remoto.

Lo que quieren (y no quieren) los empleados

El teletrabajo no solo es una condición profesional: es propensión y retención de talento. El 43 % de quienes teletrabajan buscaría otro empleo si su empresa eliminase la opción; solo un 13 % aceptaría retornar a la presencialidad sin más. Por otra parte, un 27 % pediría subida salarial para compensar costes.

Qué hacen las empresas

Casi la centro de las empresas (46 %) ofrece teletrabajo en 2025: 11 % totalmente remoto y 35 % en maniquí híbrido (en presuroso aumento respecto a 2024). La previsión a seis meses es continuista: el 79 % no cambiará su política. Es asegurar, las compañías no están desmantelando el teletrabajo; lo están recomponiendo con destino a esquemas híbridos.

Entonces, ¿por qué se percibe una "caída vaco"?

• Los casos más visibles no son representativos: Son algunos casos muy visibles (grandes corporaciones que endurecen la presencialidad) los que logran con su cobertura tapar los datos, alimentando la idea de retroceso generalizado.
• El foco en "teletrabajo 100 %": Bajan los casos de trabajo exclusivamente en remoto, mientras sube el híbrido. Si miramos solo el primer indicador, parece que "esto se acaba", pero si miramos los dos, se ve cómo se compensa.
• Confusión entre "puestos que se publican" y "multitud que ya teletrabaja": el peso del remoto en nuevas vacantes puede desmontar sin que disminuya el número de personas que teletrabajan, porque muchas posiciones ya están cubiertas bajo modelos híbridos.

Imagen | Marcos Merino mediante IA

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