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La confianza y la eficiencia del sistema de devoluciones de Amazon son dos de los pilares de su éxito. Sin secuestro, un camarilla criminal organizado encontró la forma de explotar esta confianza para conseguir un presa de 300.000 euros. Poco que ahora les ha costado una detención por parte de la Policía Franquista tras una operación desarrollada en Valencia y Madrid.
Durante más de dos abriles este camarilla criminal se dedicó a comprar productos tecnológicos de inscripción variedad, principalmente los iPhone, iPad, portátiles y cámaras, para luego disimular devoluciones que nunca llegaban a completarse, quedándose tanto con el producto como con el reembolso que le hacía Amazon.
La investigación policial, bautizada como 'Operación Alligator', culminó con la detención de siete personas en Valencia y Madrid, de entre 24 y 68 abriles, y la imputación de otras cinco internamente de este caso. La mayoría de los implicados ya contaban en sus historiales con circunstancias en delitos similares de estafa y falsedad documental.
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El método de estafa de este camarilla era asaz metódico y se basaba en el conocimiento de los procedimientos de Amazon. En primer empleo, creaban varias cuentas de cliente, en ocasiones utilizando nombres de empresa existentes, pero con las que no tenían ningún tipo de vinculación positivo con ellas. De esta forma, parecía que la cuenta era legítima, pues tenía la 'firma' de una empresa positivo detrás.
Una vez tenían estas cuentas, comenzaban a hacer pedidos de productos caros que fácilmente podían aventajar los 1.000 euros por cada uno de ellos. Al recibirlo, es donde comenzaba de verdad la verdadera estafa para Amazon.
Aquí es donde se tenía que conocer muy perfectamente las políticas de devoluciones de Amazon para poder encontrar la forma de quedarse con el moneda y asimismo con el producto. La primera logística es informar a Amazon que el producto ha llegado defectuoso, poco que llegaban ellos mismos a provocar de una forma sutil para que pareciera un error de manufactura y no intencionado.
La segunda logística fue disimular que no habían recibido el paquete. Para ello, proporcionaban direcciones de entrega poco precisas o que textualmente eran erróneas (como por ejemplo en parte de un campo) para que el repartidor se viera obligado a contactarles por teléfono para concretar el empleo de entrega.
Pero en este caso, cuando ya tenían el paquete en la mano, contactaban con Amazon para informar que el paquete no les había llegado, pero que sí se les había cobrado. De esta forma, solicitaban el reembolso y obviamente el producto se lo quedaban.
Finalmente, Amazon detectó este patrón que estaban siguiendo. En marzo de 2023 interpusieron una demanda que dio inicio a esta investigación policial. Tras tres meses, la Policía Franquista consiguió identificar a los miembros de esta red criminal, que eran de procedencia española, marroquí y venezolana.
Después, se procedió a las detenciones en Madrid, Valencia y la pueblo valenciana de San Antonio de Bengéber. En los registros, se encontró un total de 114.000 euros en efectivo, 1.500 dólares, seis vehículos y una gran cantidad de productos que fueron obtenidos de forma fraudulenta como móviles, ordenadores o cámaras.
Imágenes | Bench Accounting RoseBox رز باکس
Vía | ABC
En Genbeta | Si has sido víctima de una estafa por Internet, así es como puedes recuperar tu moneda
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