Tras años analizando el teletrabajo y la oficina, descubren que el trabajo híbrido es la peor opción: mata la innovación

Durante la pandemia por la Covid-19, se produjo un enorme cambio en dirección a el trabajo desde casa en todo el mundo. A medida que la vida actual ha vuelto, hemos ido viendo desde 2022 cómo muchos empleados esperan seguir trabajando desde casa y cómo muchos jefes se empeñan en retornar a las oficinas. En ese contexto, muchos de los empleadores están adoptando modos de trabajo híbridos.

Los deseos y exigencias de los jefes de retornar a las oficinas han sido respaldados a menudo con estudios y otras veces con excusas harto absurdas que han generado grandes polémicas, como hemos ido recogiendo en Genbeta. Para disgusto de los amantes del teletrabajo, hay un gran estudio realizado sobre una empresa tecnológica que acento de cómo el espacio de trabajo influye en la innovación y en las nuevas ideas.

Ya hemos trillado un megaestudio que concluye que la innovación necesita oficinas, pero ese estudio tenía un sesgo y es que se olvidó del presente. Pues hoy tenemos otro además sobre innovación que no va a saborear a muchos trabajadores amantes de hacer sus tareas en remoto.

Se hizo con "profesionales de tecnología en gran medida capacitados; prácticamente todos tienen títulos universitarios o avanzados en un campo de ingeniería". Todos están en la misma empresa, HCL Technologies, con sede en la India. Dice el estudio que:

Su trabajo implica importantes tareas cognitivas, así como colaboración. La innovación no es una parte central de su trabajo, pero la empresa fomenta firmemente la innovación y paga incentivos monetarios para fomentar la innovación en el trabajo. Descubrimos que la innovación se ve afectada durante el trabajo remoto.

Durante el período de trabajar desde casa, los empleados sugirieron ideas al mismo ritmo que durante el período auténtico donde trabajan en la oficina, pero esas ideas tenían una calidad promedio más depreciación. Por el contrario, durante el futuro período híbrido, la tasa de gestación de nuevas ideas disminuyó.

La innovación surge espontáneamente

La investigación ha sido realizada por Michael Gibbs, Friederike Mengel y Christoph Siemroth y compartieron las conclusiones en Nature. Los investigadores cuestionan por qué disminuye la innovación en el trabajo remoto o híbrido y afirman que parece que el trabajo híbrido aumenta el costo de la colaboración.

La innovación a menudo ocurre a través de interacciones aleatorias y espontáneas entre los empleados. Es menos probable que tales “accidentes productivos” ocurran cuando todos los empleados trabajan desde casa, lo que requiere que las empresas proporcionen canales sustitutos donde pueda ocurrir la innovación (por ejemplo, “cafeterías virtuales”).

Una pregunta es si la comunicación supuesto es igualmente propicia para la gestación de nuevas ideas como la comunicación cara a cara.

Las desventajas del trabajo híbrido

"En el modo híbrido, surge un problema de coordinación adicional si algunos empleados están en “cafeterías virtuales” mientras que otros están en cafeterías reales", dice el estudio. Al analizar los datos de entrada a la oficina de la grado de trabajo híbrido, encontramos que la innovación cae particularmente bruscamente en equipos que varían mucho entre estar en casa y la oficina, en comparación con los equipos que están menos dispersos.

La empresa tuvo tres modalidades de trabajo durante el período de la investigación (que fue de entre 2018 a 2022). En la primera grado, los empleados trabajaron desde la oficina. Cuando llegó la pandemia de Covid-19, la empresa pasó abruptamente a trabajar desde casa. Cuando la pandemia disminuyó, la empresa pasó a un esquema de trabajo híbrido. Entre sus conclusiones: a un empleado le toma más o menos de 111 meses, o un poco más de 9 abriles, crear una idea. Durante el trabajo híbrido, los empleados generaron una media de 0,007 ideas al mes (143 meses o poco menos de 12 abriles).

Una posible explicación de por qué el maniquí híbrido podría ser peor para la innovación son la dificultad de coordinación y comunicación. Si todos están en la oficina, es hacedero cuchichear con los compañeros y las reuniones pueden ser espontáneas y en persona. Esas conversaciones pueden conducir a la gestación de nuevas ideas y proporcionar feedback (positiva o negativa).

Si todos están en casa, entonces, de guisa similar, todos estarán en las mismas salas de chat y videoconferencias, y utilizarán los mismos modos de comunicación en partidura. Es posible en este caso establecer canales de comunicación sustitutos.

Sin incautación, en el maniquí híbrido, algunos empleados están en la oficina y otros en casa, y en distintos momentos de la caminata sindical (muchas empresas han permitido el trabajo asíncrono, positivo a su vez para dejar espacios de concentración absoluta ya que hay trabajadores que prefieren desaguarse del horario global porque pueden concretarse mejor).

Los empleados de oficina pueden cuchichear entre ellos en persona, mientras que los empleados remotos hablan en partidura. Encima, programar una conversación puede resultar más difícil en el modo híbrido.

Imagen | Foto de Resume Genius en Unsplash

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